Como práctica mental y corporal, el mindfulness se centra en la interacción entre el cuerpo, el cerebro, el alma y su comportamiento. Vamos describir brevemente en qué consiste y los beneficios principales:
Conceptos básicos sobre el mindfulness
Existen varias técnicas de meditación que proponen enfoques ligeramente diferentes: mientras algunas ramas se centran sobre todo en la concentración, otras profundizan más en la autoaceptación y la conciencia plena.
La primera es la más tradicional, que viene a etiquetarse como mantra. La segunda es la que nos ocupa hoy: el conjunto de técnicas de mindfulness.
¿Qué entendemos como mindfulness?
El mindfulness es lograr un profundo estado de conciencia gracias a un conjunto de técnicas casi secuenciales. Se trata de tratar de que nuestra conciencia se relaje hasta tal punto que no emita juicios de valor de nuestros pensamientos, sensaciones o sentimientos. Dominar los procesos atencionales es dominar la técnica del mindfulness.
La concentración en el mindfulness trata de que prestar el 100% de nuestra atención al aquí y el ahora, separando al propio individuo de sus pensamientos, abstraerse por completo de lo que está ocurriendo.
¿Cuándo es ideal practicar mindfulness?
Lo ideal es comenzar dedicándole unos 10 minutos al día para poco a poco ir ampliando este espacio hasta la media hora diaria. Se trata de aclimatar la mente sin frustrarnos, y acostumbrar al cuerpo a una rutina, que debe terminar haciéndose de forma natural.
Hay quien comienza su día a día con su sesión cotidiana de mindfulness, pero si no tienes tiempo para hacerlo tienes que estar preparado/a para lograr concentrarte en cualquier lugar o circunstancia, incluso en el trabajo. Es importante que logremos poder dominar la técnica porque tiene (entre otros) siete importantes beneficios:
1. El primero de los beneficios del mindfulness es el aumento de la creatividad
Varias universidades han demostrado que el mindfulness puede ayudar a mejorar la creatividad de una persona después de una sola sesión de meditación, tanto en niños como en adultos. Está demostrado que aquellos que practican el mindfulness se desempeñan mucho mejor en una tarea específica en la que se les invita a dar nuevas ideas.
Se sabe que el mindfulness aumenta y fomenta el tipo de pensamiento llamado pensamiento divergente, que te permite encontrar más soluciones a un problema dado, lo que lo convierte en otro componente de la creatividad.
Las inteligencias múltiples
Howard Gardner define la inteligencia humana teniendo en cuenta tres conceptos:
- El conjunto de habilidades que permiten a un individuo resolver problemas encontrados en la vida cotidiana. Ejemplos: Tanto hacer un cálculo matemático como afrontar retos humanos como un trabajo en equipo.
- La capacidad de crear un producto real u ofrecer un servicio que tenga valor en una cultura determinada. Ejemplos: Escribir una carta, poder escuchar a una persona con dificultades o transformar la arcilla en una estatua.
- La capacidad de plantear problemas y encontrar soluciones a estos problemas, lo que permite en particular que un individuo adquiera nuevos conocimientos.
Si por ejemplo a un niño le das libertad para resolver un problema sin patrones establecidos, colaboras en que su mente se expanda y se desarrolle. El 80% de la escuelas centran todo el peso de la enseñanza solo en la inteligencia verbal-lingüística, obviando otro tipo de inteligencias. Las inteligencias múltiples que se pueden potenciar practicando mindfulness.

2. Baja los niveles de ansiedad
También se ha demostrado que el mindfulness reduce los niveles de ansiedad en las personas que lo practican regularmente. Cuando meditamos, comenzamos a aflojar las conexiones de ciertas vías nerviosas. Una parte de nuestro cerebro llamada corteza prefrontal medial procesa información que relacionamos con nuestra experiencia y con nosotros mismos.
Por lo general, las vías neuronales del miedo y las sensaciones corporales en la corteza prefrontal medial son fuertes. Por lo tanto, cuando te encuentras en una situación aterradora, desencadenas una reacción muy fuerte en esta parte de su cerebro, lo que lo te hace sentir ansioso e inestable.
«Cuando meditas, debilitas las vías neuronales del miedo, lo que te permite reaccionar de manera diferente a las mismas situaciones»
Otro beneficio del mindfulness es que, al debilitar esta conexión, puedes responder con calma a situaciones potencialmente difíciles.
3. Memoria mejorada
Aquellos que practican mindfulness son más capaces de filtrar las distracciones y aumentar su productividad. Esta capacidad de ignorar las distracciones de fondo te permite memorizar rápidamente cosas que antes te hubiera resultado imposible.
4. Mejores relaciones
Un nuevo beneficio del mindfulness es también mejorar tu estado de ánimo y darte una mejor sensación de «conexión» con otras personas. Esto te ayuda a ser más compasivo y empático con los demás. El aprendizaje cooperativo también se potencia practicando mindfulness.
Ya sea que estés buscando mejorar tu relación con aquellos que te importan o conectarte de manera más efectiva con tus empleados y clientes, el mindfulness puede ser la respuesta a muchas de las preguntas que te hacías hasta ahora.
5. Ayuda para la salud
Muchos estudios han demostrado que mientras meditas puede bajar la presión arterial si tienes hipertensión.
Además, aquellos con enfermedades respiratorias como la gripe han podido recuperarse más rápido que aquellos que no meditan. Las mujeres que sufren de menopausia también pueden encontrar alivio en el mindfulness.

6. Mejora el sueño
Uno de los beneficios del mindfulness es su capacidad para ayudar a mejorar la calidad y la cantidad del sueño.
Si sumas una buena rutina de horarios al acostarte, buscas un lugar con un aire limpio y agregas los efectos del mindfulness,esto puede ayudarte a dormir mejor y combatir los síntomas asociados con insomnio como la fatiga y la depresión.
7. Mejora la libido. El más infrabalorado de los beneficios del mindfulness
Además de dormir mejor, puedes aumentar la calidad e intensidad de tu vida sexual. Este es uno de los beneficios del mindfulness más infravalorado.
Una de las principales razones para no tener relaciones sexuales en pareja es la fatiga. La respuesta de nuestro cuerpo al estrés generalmente es a través de la lucha o la huida. Cuando esto sucede, liberamos cortisol, la hormona del estrés, así como adrenalina para ayudarnos a combatirlo. Esto aumenta nuestra presión arterial y deprime nuestro sistema inmunológico. Nuestra libido queda atrapada frente a un fuego cruzado.
Una reflexión final
Puedes estar un poco abrumado y pensar que no hay forma posible de incluir el mindfulness en tu vida ya de por sí muy ocupada. Sin embargo, hay buenas noticias: ¡puedes! Comienza con solo cinco minutos cada día. Cinco minutos los puedes quitar de mirar el móvil o pensar en cosas negativas. Cuando te sientas más cómodo con el mindfulness, puedes comenzar a aumentar la duración de tus sesiones.