Son múltiples los motivos por los que podemos pedir un préstamo personal como es comprar un coche o una moto, reformar el hogar, financiar estudios e, incluso, celebrar eventos como bodas. Los préstamos personales nos ayudan a financiar la compra de un objeto o pagar un proyecto que vamos a realizar.
Sin embargo, su concesión suele estar condicionada por diversos motivos, factores y requisitos. Las entidades financieras no conceden el préstamo a todo el mundo, pues deben asegurarse, por encima de todo, que la petición del dinero es rentable y seguro para ellas.
¿Cuándo pedir un préstamo personal?
Si lo que queremos es comprar un coche, reformar la vivienda o hacer frente a un gasto importante y no tenemos dinero suficiente, la mejor opción es pedir un préstamo. Este recurso es empleado cuando sabemos que necesitamos una cantidad determinada de dinero, normalmente elevada y que tendremos que devolver en un cierto periodo de tiempo. Por eso, es imprescindible firmar un contrato donde se determinen los años de amortización, comisiones, intereses y la cuota mensual.
Una vez aprobada la concesión, ingresarán la cantidad en la cuenta bancaria para poder disponer del dinero. Desde ese mismo momento, ya tendremos que comenzar a devolverlo con intereses añadidos y prefijados previamente en contrato.
¿Dónde puedo pedir un préstamo personal?
Cuando recurrimos a solicitar dinero, lo primero que debemos preguntarnos es dónde o a quién le vamos a pedir la cantidad necesaria. Si ya has pedido algún préstamo antes, seguro que sabes que hacer, pero si no lo sabes y es la primera vez que vamos a pedir un préstamo, seguramente estemos pedidos.
En España podemos acudir a una gran variedad de prestamistas para solicitar el dinero, aunque, en función de diferentes variables y el perfil del cliente, algunos se adaptan a nosotros mejor que otros. Se puede acudir a las siguientes entidades.
- Bancos. Podemos encontrar variedad de bancos que pueden realizar préstamos personales.
- Cajas de ahorros.
- Cooperativas de crédito.
- Prestamistas privados (con capital privado). Aquí se destaca la existencia de los préstamos rápidos, mini créditos y créditos online.
- Grandes superficies, supermercados y tiendas. No ofrecen una cantidad de dinero como tal, sino que financian las compras de ciertos productos. Su ventaja es que el tipo de interés durante los primeros meses suele ser 0%.
- Empresas de tarjetas de crédito apoyadas por instituciones financieras.
- Plataformas de préstamos entre particulares.
Requisitos para pedir un préstamo personal
Antes de ir a algunas de estas entidades y solicitar financiación, hemos de tener en cuenta que, en función del importe a pedir y el tipo de préstamo, tendremos que cumplir una serie de requisitos. Los más comunes son:
- Ser mayor de 18 años.
- Disponer de documento de identidad en vigor (DNI, pasaporte, carnet de conducir).
- Pedir la cantidad exacta de dinero y el fin para el que se va a usar el dinero.
- Demostrar solvencia.
- No superar una capacidad de endeudamiento máxima.
- Demostrar que el dinero va a poderse devolver. En muchos casos, en los préstamos personales no se suele exigir aval ya que, en caso de no pagar, será el endeudado y no otra persona quien responda por los ingresos, derechos y bienes que posea.
- Solicitud de justificante de ingresos. Si somos autónomos necesitamos aportar el certificado de alta de autónomo, la cuota de seguridad social o la última declaración del IVA. Pero, si somos trabajadores por cuenta ajena, bastará con entregar las dos o tres últimas nóminas. Así mismo, si no estamos trabajando, tendremos que demostrar que disponemos de dinero recurrente.
- Fotocopia de la declaración del IRPF.
- Contrato de trabajo. El hecho de que sea o no indefinido es una de las claves que se tiene en cuenta a la hora de aprobar o denegar el préstamo.
- No estar incluido en la lista de morosos como son RAI o ASNEF.
- No tener deudas por impago.
- Escrituras de la casa, contrato de alquiler, declaración de patrimonio o de bienes, etc.
¿Qué documentos y requisitos adicionales pueden pedir?
Una vez comprobado que cumplimos con los requisitos anteriores, podemos acudir a una entidad financiera para solicitar el préstamo que solicitamos. Si piden más o menos requisitos dependerá de cada entidad, así como del perfil de la persona que pide el préstamo y la cuantía del mismo.
Por último, aunque no son considerados “requisitos” como tal, la entidad puede proponer ciertas condiciones ventajosas para el préstamo como suscribir una serie de productos con ellos, como es domiciliar la nómina o recibos en el banco, suscribir un seguro de pago del préstamo (fallecimiento, invalidez, etc.) o contratar otros seguros (hogar, coche, etc.) e, incluso, contratar un plan de pensiones.
Como conclusión, para pedir un préstamo personal, la financiera siempre pedirá una serie de requisitos. En función de la entidad, la cantidad de dinero y el tipo de prestamista que sea, tendremos que incorporar más o menos documentación y cumplir con un perfil determinado de prestatario.